Bueno pues este martes apreciamos una
inusual cantidad de policías y ello era debido, claro está, a una anunciada y
prohibida concentración de las organizaciones "provida" por el tema
del aborto. También había algo de presencia mediática que poco a poco se fue
incrementando, pero que a nosotros no nos hacían ni caso.
La cosa estaba movidilla y encima con la
dimisión del Ministro Gallardón, le dedicamos una despedida sin habernos dado
una solución. Lo del nuevo está por ver qué trae en la mochila y si en algún
recóndito apartado se le ha escondido nuestro expolio y lo quiere desempolvar.
Se comentó la pasada Asamblea de nuestra
Asociación; se anunció la concentración del próximo jueves día 25; por supuesto
se informó de esa dimisión que mucha gente desconocía y, en resumen, más de lo
mismo, cánticos, reclamaciones de juicio ya, alusiones al atraco perpetrado
contra nuestros ahorros, exigencia de que los concursales se vayan a la pu..
calle y dejen de expoliar más nuestro dinero, etc., etc.
Algunos de nosotros, cuando la sesión de
nuestra concentración se levantó a las 20,00 horas, nos quedamos por la zona
para contemplar de primera mano la anunciada concentración y ya quisiéramos
haber tenido, aunque sólo fuese un día, la movida mediática que tenían estas
doscientas o trescientas personas que allí se reunieron.
En torno a las 21,30 horas contamos unos
diez o doce medios, entre seis y siete cámaras de T.V., el resto eran radios o
fotógrafos, todos haciendo entrevistas. Y ojo, se quedaron hasta las 22,30
horas. Eso sí, la policía tomando datos y D.N.I. para levantar un informe,
decían, ya que la concentración estaba expresamente prohibida. Que pena, que
envidia, prohibida y a las 9 de la noche y en torno a trescientas personas; la
nuestra autorizada y a las 7 de la tarde y ... bueno, ahí lo dejo.
Sabemos que esto ya no es noticia, sabemos
que es incluso aburrido reseñar cada semana la misma cantinela. Sabemos que ya
no despierta esos comentarios de apoyo y ánimo que tanto proliferaban hace unos
años, o incluso hace unos meses. Somos conscientes de que el abandono, la
desidia, el más de lo mismo, son los de siempre y el cada martes con las mismas
canciones, hacen su mella y causan poca motivación.
Habría que volver a explotar, tendrían que
volver a intervenirnos, deberían encarcelar a alguien relacionado con Fórum y
Afinsa o que salieran los palmeros del Gobierno, sus medios de información o
realizar algún acto más o menos esperpéntico para que volvamos a reaccionar.
Quizás algo más serio como una encerrada, una huelga de hambre, una plantá
frente a algún organismo con tiendas de campaña, carteles y pancartas. Algo que
hiciera o sirviera de revulsivo para esta gran masa de ciudadanos, expoliados,
usurpados, insultados, maltratados y despojados de todos sus derechos,
volvieran a tener el coraje de salir a la calle a decir: BASTA.
Mientras tanto, los de siempre, los
irreductibles, seguiremos aburriendo al personal, pero conservaremos la
dignidad que nos queda.
Y se noto. Se noto el regreso de muchos compañeros que
han estado con las merecidas vacaciones. Lo que sigue sin notarse es que alguien en la cueva se
manifieste de alguna forma. Ni señales de humo. Tampoco se manifiestan los jueces. Ni la Fiscalia. Ni
ningún medio a pesar de los correos y llamadas realizadas. En resumen. Que todo sigue a peor. Los Concursales
vaciando las empresas. Los jueces esperando a que prescriban las connivencias y
fechorías y los políticos a lo suyo. Las elecciones. España va bien. Los españoles también. Las
víctimas de Forum y Afinsa cada vez mas jodidos y más arruinados.
Como
estaba previsto comenzamos septiembre con nuestro horario de 19 a 20 horas.
Aumentó
la presencia de compañeros aunque sin ser una multitud pero ya se nota el
regreso de las vacaciones.
Tuvimos
alguna conversación interesante con personas que ocasionalmente transitan por
Génova y veremos en qué queda su oferta de colaboración.
Por
lo demás siguen los sordos igual de sordos. Los mentirosos igual de cínicos.
Los políticos igual de impresentables y los jueces igual de impasibles.
Una
auténtica y míserable canallada en toda regla. Esperando a que prescriban las
atrocidades. A que dejen de tener efecto nuestras reclamaciones. A que
vayamos falleciendo o aburriendonos.